Estandarizar o uniformar significa hacer dos o más cosas lo más parecido posible. ¿Cómo se aplica esto a la edición y producción de una obra? Generalmente, al planificar la realización de una obra, se establece un modelo para que este sirva de referencia. En un modelo, se incluyen las características generales y específicas que se implementarán en una publicación.
Entre las principales características están:
Diseño gráfico de la publicación, es decir, todos los detalles gráficos y forma en la que se incluirán: viñetas, cintillos, motivos, colores, composiciones, diseños de secciones generales y específicas, encabezados, notas de interés, tipo de numeración y pantallas.
Tipos y familias de fuentes que se utilizarán en el cuerpo de la publicación, los capitulares, titulares, subtítulos, numeración, caracteres especiales, entre otros.
Atributos de texto especiales, es decir, el estilo de los atributos que se aplicarán en la publicación: cuándo se utilizará la negrilla, cursiva, VERSALES, redondas, etc.
Características de la línea de ilustración que se usará en la obra, si esta lo contemplara.
Tipos de imágenes, ordenadores gráficos, esquemas y mapas de conceptos.
Tipo de redacción que se utilizará en los textos, es decir, cómo deberá construirse el discurso, si este será directo, impersonal, si se personalizará por el tipo de público al cual se dirigirá la publicación, cómo se estructurarán las instrucciones, entre algunos aspectos.
Una hoja de estilo en la cual se establecerán los criterios que serán aplicados en la obra, así como las características específicas que contemple la organización, editorial o institución (normas editoriales específicas). Por ejemplo: uso de demostrativos tildados o sin tilde, prohibición del uso de algunos verbos, sustantivos o adjetivos, uso de mayúsculas en algunas palabras que no las llevan obligatoriamente, forma de escribir épocas o momentos, signos monetarios, espacios o comas entre cantidades, y escritura de cantidades. En el caso de las editoriales que producen obras para otros países, se consignan aspectos editoriales y palabras específicas utilizadas en cada uno de los páises para los cuales se produce.
Tipo de viñetas y su presentación. En este sentido, es importante especificar cuál será el diseño y cómo se presentarán los textos. Algunas instituciones utilizan el punto al final de cada ítem incluido en una viñeta, de manera indistinta, es decir, sin importar si el texto es una frase, una oración, o simplemente una palabra. Otras entidades con editores más experimentados, utilizan criterios distintivos para la aplicación de los signos de puntuación.
Numeración y nomenclatura. Este tipo de atributos es utilizado principalmente en los manuales. Esto se debe al tipo de procedimientos y desagregación que se utiliza para los temas y subtemas. En ese sentido, se establece una desagregación que responde a una norma internacional de estandarización.
Por ejemplo:
1.
1.1.
1.1.1.
A)
1.
a.
b.
Responsabilidad en la uniformidad de las publicaciones
Una vez establecidos los criterios antes mencionados, el responsable directo de velar porque se cumplan es el editor. No obstante, el corrector de estilo, el corrector de pruebas y los autores, deben ceñirse también a estos criterios para lograr que la obra cumpla con las características de uniformidad establecidas.
Cuando la publicación que se produce es una serie, pueden apreciarse mejor los criterios de uniformidad y detectarse claramente las omisiones de los detalles descritos.
Aunque existen otros criterios, esta no es una lista ni una recopilación exhaustiva. Responde solamente a muchos años de experiencia en diferentes instituciones y editoriales. Indiscutiblemente, considero que puede enriquecerse con el aporte de todos ustedes. Dejo abierto el debate, ¿qué opinan?
Entre las principales características están:
Diseño gráfico de la publicación, es decir, todos los detalles gráficos y forma en la que se incluirán: viñetas, cintillos, motivos, colores, composiciones, diseños de secciones generales y específicas, encabezados, notas de interés, tipo de numeración y pantallas.
Tipos y familias de fuentes que se utilizarán en el cuerpo de la publicación, los capitulares, titulares, subtítulos, numeración, caracteres especiales, entre otros.
Atributos de texto especiales, es decir, el estilo de los atributos que se aplicarán en la publicación: cuándo se utilizará la negrilla, cursiva, VERSALES, redondas, etc.
Características de la línea de ilustración que se usará en la obra, si esta lo contemplara.
Tipos de imágenes, ordenadores gráficos, esquemas y mapas de conceptos.
Tipo de redacción que se utilizará en los textos, es decir, cómo deberá construirse el discurso, si este será directo, impersonal, si se personalizará por el tipo de público al cual se dirigirá la publicación, cómo se estructurarán las instrucciones, entre algunos aspectos.
Una hoja de estilo en la cual se establecerán los criterios que serán aplicados en la obra, así como las características específicas que contemple la organización, editorial o institución (normas editoriales específicas). Por ejemplo: uso de demostrativos tildados o sin tilde, prohibición del uso de algunos verbos, sustantivos o adjetivos, uso de mayúsculas en algunas palabras que no las llevan obligatoriamente, forma de escribir épocas o momentos, signos monetarios, espacios o comas entre cantidades, y escritura de cantidades. En el caso de las editoriales que producen obras para otros países, se consignan aspectos editoriales y palabras específicas utilizadas en cada uno de los páises para los cuales se produce.
Tipo de viñetas y su presentación. En este sentido, es importante especificar cuál será el diseño y cómo se presentarán los textos. Algunas instituciones utilizan el punto al final de cada ítem incluido en una viñeta, de manera indistinta, es decir, sin importar si el texto es una frase, una oración, o simplemente una palabra. Otras entidades con editores más experimentados, utilizan criterios distintivos para la aplicación de los signos de puntuación.
Numeración y nomenclatura. Este tipo de atributos es utilizado principalmente en los manuales. Esto se debe al tipo de procedimientos y desagregación que se utiliza para los temas y subtemas. En ese sentido, se establece una desagregación que responde a una norma internacional de estandarización.
Por ejemplo:
1.
1.1.
1.1.1.
A)
1.
a.
b.
Responsabilidad en la uniformidad de las publicaciones
Una vez establecidos los criterios antes mencionados, el responsable directo de velar porque se cumplan es el editor. No obstante, el corrector de estilo, el corrector de pruebas y los autores, deben ceñirse también a estos criterios para lograr que la obra cumpla con las características de uniformidad establecidas.
Cuando la publicación que se produce es una serie, pueden apreciarse mejor los criterios de uniformidad y detectarse claramente las omisiones de los detalles descritos.
Aunque existen otros criterios, esta no es una lista ni una recopilación exhaustiva. Responde solamente a muchos años de experiencia en diferentes instituciones y editoriales. Indiscutiblemente, considero que puede enriquecerse con el aporte de todos ustedes. Dejo abierto el debate, ¿qué opinan?
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